TRONCO, lo que pasó cuando te fuiste

A la primera escucha de Tutupá prevemos que estamos ante uno de los discos más ornamentados de Tronco y que plantea novedades en forma y fondo. Un claro ejemplo son algunos singles de adelanto del disco. Con «Burbujas de amor» Conxita y Fermí se atreven con una cumbia psicodélica confesional sobre conocer a alguien y que, en esa incertidumbre de saber qué será lo que pase entre vosotros, se desencadene la imaginación. Sergio Oramas aka Muyaio, toca el timple en esta canción. «Lo que pasó cuando te fuiste», columna vertebral del disco, repite hasta la saciedad su brillante y triste estribillo envolviéndonos en una hipnosis melódica rematada por la guitarra arpegiada de Fermí. La temática de «No te volveré a ver» está íntimamente ligada a «Lo que pasó cuando te fuiste». En esta canción colabora a la guitarra española Juan Crespo (Gabriel y Vencerás) y Miquel Serra interpela a Conxi diciéndole que se apure, que si no, perderá el tren.

Grabando en una casa con los elementos propios de la misma, las canciones van acompañadas de infinidad de sonidos “caseros” como la afilación de cuchillos de «El Afilador», un duelo atemporal con espadas que llegan al fondo de sendos corazones, el primer western de Tronco. «La niña de las arras» es Conxi, a quien por su 29 aniversario le regalaran una vajilla entera con todo su menaje, ollas, etc. Las guitarras de Fermí evocan a los rondadores de Lorena Álvarez, quien tiempo atrás regalara una versión a Tronco de su canción «El papel» junto a Nacho Vegas, otro de los referentes del dúo pratense.

La melódica es un instrumento muy usado por la banda, presente en «La niña de las arras» y «Hola, cómo estás» donde además Conxi toca la guitarra por primera vez en una grabación de Tronco. El acordeón, primo hermano de la melódica, está presente en «La plañidera», la primera ranchera de Tronco.

El tiempo para llorar llega en Tutupá con «El Crac». Pop de hospital donde los boxes y la maquinaria médica reverberan y sus teclados pudieran recordarnos a los que grabara Daniel Johnston.

El 4º disco de Tronco tiene una apertura brillante con «No entiendo nada», último single de adelanto antes de la publicación del LP y un cierre con la emocionante «Epílogo», versión a piano de pared de Bookends (Simon & Garfunkel, 1968) dúo referente de los hermanos Herrero Delfa y de los que ya hicieran una versión en su anterior trabajo NAINONAI. «Esa vez» es la canción más nocturna de Tronco, e «Hijoputero», canción en que Fermí y Conxita colaboran con Candela Escobar, nos habla de esa gente mala que todos esperamos que se las lleve el viento

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